Ya es
nochebuena... nada nuevo bajo el sol. Se espera de nosotros que confeccionemos las correspondientes felicitaciones (todavía no sé que es lo que tengo que felicitar) religiosas, divertidas, adorables o coñeras... Yo este año utilizaré la típica felicitación superficial, ya que me parece las más adecuada para estas fiestas. Sin intención de molestar a ningún ser navideño, diré que estás navidades sonreiré a pesar de mis creencias acerca de la Natividad, al fin y al cabo, sonreír no cuesta nada :)

Espero que vuestros regalos superen en valor neto al producto interior bruto de cualquier país tercermundista, ya que es de buen consumidor disfrutar de la suerte que nos ha traído a este hemisferio y hacerse con algunas pertenencias, antes de que el personal se vuelva loco y comience a asaltar el Corte Inglés.

Si bien nuestra felicidad envuelta en celofán es susceptible de cambiar según el ritmo de nuestro corazón, felicitaros a aquellos que poseeis amor (palabra intimamente ligada a
Navidad) ya que los que no lo teneis no valeis nada (esperemos todos que en San Valentín seamos poseedores de tal palabra, si no queremos ser marginados por el comercio grande y mediano). Aquellos que no disfruten/sufran (mejor sufran/disfruten) del dichoso amor... aprovechad las ofertas en turron de última hora, el chocolate fundido, las almendras garrapiñadas y todas esas cosas sabrosas que cualquier ciudadano de a pie puede encontrar en el supermercado más cercano. Doy gracias a los ángeles de que a nadie le falte un zanco de pollo relleno estas fiestas :) Es maravilloso saberlo y desentenderse. ¡Todos a comer!

Y que decir del mejor acompañante para disfrutar unas fiestas negras...
El alcohol. Pronto seremos como pavos golpeandonos la cabeza bajo los adornos navideños de las calles de cualquier pequeña ciudad (eso mientras no golpeemos nuestros automóviles) Es un recurso relativamente barato (esto tampoco le falta a nadie), permitido y que nos hace parecer aún más tontos ¡Divertidísimo! No sé vosotros... pero yo me tomaré alguna que otra copa de cava. ¡A vuestra salud!

De momento me enfundaré en mi traje de
Papa Nöel delgado y bajito e intentaré darle una sorpresilla a los peques de la casa, si hay algo que adore en estas fiestas (esta vez ironías aparte) es la inocencia. Brindo por ella.

Lo dicho:
FELIZ NAVIDAD A TOD@S :D